Ella fue transportada por la vehemencia del amor más puro.
19:44
La Virgen no murió ni de vejez, ni de enfermedad, fue transportada por la vehemencia del amor más puro y su rostro lucía tan calmo, tan radiante y feliz, que a su tránsito hacia la muerte se le da el nombre de dormición.
Joris-Karl Huysmans (Francia
| ||
1 comentarios