La palabra
reverencia (del Latín reverentia)
alude a respeto o veneración que alguien tiene a otra persona. Como gesto, es
la inclinación del cuerpo en señal de respeto o veneración.
Según el Dr. J. Domínguez
en su Diccionario Bíblico Cristiano, encontramos que esta inclinación del
cuerpo es señal de respeto, veneración o adoración, se hace a:
En la Biblia:
- A Dios,
adorándolo, (Hb 12, 28)
- Los Magos a
Jesús, (Mt 2, 11)
- Al Santuario,
(Lv 19,30)
- Balaán ante el
ángel del Señor, (Nm 22,31)
- Al Rey David
(2S 1,2, 1R 1,16), a José (Gn 43,28), Moisés a su suegro (Ex 18,7)
En la Iglesia Reverenciamos:
- A Jesucristo en el Sagrario, adorándolo.
- Al altar, signo de la presencia de Cristo y
lugar del Santo Sacrificio.
- A los Santos, honrándolos.
Para la Celebración y mejor vivencia de la Santa Eucaristía, la Ordenación General del Misal Romano (OGMR) da unas normas claras de las posturas corporales que
hay que adoptar durante la Eucaristía. En su numeral 43 la OGMR indica cuales
son estos tipos de Reverencia, Inclinación o Posturas durante la celebración de
la Santa Misa. Veamos:
La Inclinación: Indica
reverencia y honor a las personas o a lo que representan y puede ser de dos
tipos: inclinación de cabeza e inclinación de cuerpo o profunda, que se hace
desde la cintura.
La inclinación de
cabeza:
Se le hace al nombre de Jesucristo, de la Virgen y del santo en cuyo
honor se celebra la Misa.
Al sacerdote durante
la Misa ya que él actúa in persona Christi Capitis.
Todas aquellas
personas que suban al presbiterio para realizar alguna función como por ejemplo
los lectores o los que van a hacer las peticiones de la Oración Universal,
tanto al llegar como al marcharse.
La bendición
presidencial que concluye la Misa se debe recibir con inclinación de cabeza.
La
inclinación de cuerpo o reverencia profunda:
Se le hace al altar que simboliza a Cristo.
Se debe hacer reverencia profunda en el Credo al iniciarse las palabras “Creo en Jesucristo… hasta:
nació de santa María Virgen”, si es la Solemnidad de Navidad o la fiesta de la Anunciación del Señor
nos arrodillamos.
Contamos también con la Genuflexión: Esta hace
siempre con la rodilla derecha llevándola hasta el suelo y significa adoración. Por
ser signo de adoración está reservada al Santísimo Sacramento y a la Santa Cruz
en la liturgia del Viernes Santo. En resumen, se debe hacer genuflexión cada
vez que pasemos por delante del Santísimo Sacramento.
Alabado
sea Jesucristo